Salud bucal: reflejo de la salud general
El sangrado de encías inicialmente se atribuye a una limpieza dental insuficiente, pero sabemos que puede ser un síntoma de enfermedades más graves de origen hepático, renal o ser indicativo de diabetes. Podemos decir que la salud bucal es un espejo de la salud general del organismo, en cuanto ofrece pistas reveladoras. Se trata de síntomas y signos que van más allá de sufrir una caries o presentar demasiado sarro entre tus dientes. El mal aliento, las aftas bucales o la sensación de que tus dientes se aflojan se encuentran entre estas señales de alarma.
En Clínica Dental Alberto Romero en Ourense, vamos a dedicar este artículo al sangrado de las encías como una dolencia que habrás experimentado en alguna ocasión y cuyas casusas pueden ser las siguientes.
Sangrado de encías por higiene oral insuficiente
Una encía sana no sangra, es firme y de color rosa. El sangrado es un síntomas de inflamación de las encías, una alteración qeu se llama gingivitis. Una de las causas puedes encontrarla en una higiene inadecuada que permite a la placa bacteriana adherirse sobre los dientes. El tabaquismo o los cambios hormonales durante el periodo de gestación también producen gingivitis. Un cepillado correcto contribuirá a su desaparición.
Algunos pacientes nos indican que cuando comienza el sangrado dejan de cepillar la zona, lo cual solo contribuye a agravar la situción.
Desde Clínica Dental Alberto Romero insistimos mucho en la importancia del cepillado interdental con cepillos interproximales y el uso adecuado del hilo o seda dental. Si tienes gingivitis o periodontitis que es más grave, conocida también como piorrea, es clave acudir cuanto antes a tu dentista para tomar las medidas necesarias y evitar su progresión.
Enfermedades asociadas al sangrado de encías
Los aparatos de ortodoncia fija, las prótesis mal colocadas, la menopausia, el estrés, todos pueden provocar gingivitis. Pero ese sangrado de encías también podría suponer el primer signo de una enfermedad sistémica grave.
Diversas investigaciones aseguran que más de medio centenar de estas enfermedades están relacionadas con la gingivitis y la periodontitis.
El daño hepático, la leucemia, la disfunción eréctil, los partos prematuros, la artritis reumatoide, las patologías renales, los ictus, el infarto de miocardio o la diabetes también se han asociado a esta situación. Esta última, la diabetes, fue una de las primeras enfermedades que se asociaron a la periodontitis. Además, en este caso, la relación va en ambas direcciones, pues, si eres diabético, contarás con más opciones de desarrollar periodontitis; y con esta, los niveles de glucosa empeoran.
Lo que queremos trasladar a nuestros lectores es que el sangrado de encías es una anomalía que no se debe dejar pasar por alto. Ante los primeros signos de inflamación de encías y/o sangrado lo más importante es pedir cita cuanto antes con un dentista para hacer una valoración, determinar las causa y comenzar a actuar para evitar la progresión.